Convocatorias y Citas: Colegio Luís de Gongora 60-64. La Vera. Cáceres. 2010.

Encuentro en LA VERA (Cáceres)

Como estaba programado, durante días 21, 22 y 23 de mayo, los antiguos alumnos de la “cosecha 1961-64” del colegio Luis de Góngora, celebramos nuestro II Encuentro Anual y con en esta breve reseña queremos haceros participes a todos de lo allí vivido.

El lugar elegido este año ha sido La Vera (Cáceres) y sobre Serafín Lugones con la inestimable ayuda de Encarna, su esposa, recayó la responsabilidad de su organización.

A lo largo de la tarde del viernes 21 fuimos llegando a nuestro punto de encuentro en el Hotel Rural Imperial, situado en Jarandilla de La Vera, donde Serafín y Encarna, no estaban esperando como buenos anfitriones.

Como primera impresión, tanto las instalaciones del hotel como su ubicación, nos predispusieron a tener por delante unos días de lo más placenteros, puesto que el acierto en su elección fue total.

Una vez ubicados en nuestra habitaciones y habiendo recuperado el cansancio del viaje, algunos habían recorrido cerca de 700 Km., en los relajantes jardines del hotel, nuestros anfitriones, ¡que grandes anfitriones!, nos llevaron a visitar Jarandilla, con su precioso Parador, para terminar cenando en un restaurante de la localidad, retirándonos a descansar, pues al día siguiente nos esperaba una apretada agenda.

El sábado 22, comenzó con un abúndate desayuno en grupo, para a continuación y en un comodísimo autobús, iniciar nuestro periplo turístico con una primera parada en Cuacos de Yuste, donde pudimos admirar su casco antiguo, sus plazas sus fuentes, su iglesias, sus gentes, etc. . . .

Nuestra siguiente parada se realizó en el Cementerio de los Alemanes, singular lugar donde se encuentran enterrados 28 soldados de la Primera Guerra Mundial y 154 de la Segunda Guerra Mundial, que fallecieron en España (aviones caídos, barcos hundidos, etc.). Parece ser que se ha pretendido que estén cerca del que fue su Emperador Carlos V.

A continuación visitamos el Monasterio de Yuste, donde nos enteramos que, el ahora en España Carlos I, murió de paludismo, conociéndose la fecha y hora ??? de la picadura del maldito mosquito.

Nuestro viaje continuo camino de Garganta la Olla, donde aparte de la belleza del pueblo, tienen como personaje de leyenda a la Serrana de la Vera, la moza se las traía (buscarlos en Internet) y además por aquello de ser un “problema” histórico y tener los pobres nobles que desfogar sus ansias amatorias, dispone en la calle Chorrillo, ¡¡!!, de la “Casa de Muñecas”, donde la “mozas de fortuna” atendían a los caballeros, que para el caso de vestían de azul, tal cual es el color de la mentada casa.

Como es de recibo, en la plaza de Garganta hicimos el alto del “ángelus”, es decir el momento a media mañana en la que se toma un refrigerio.

De vuelta al hotel y después de comer y un brevísimo descanso, reiniciamos la expedición en este caso a la Vera norte, empezando por Guijo de Santabárbara, donde a la belleza habitual del paisaje y de los pueblos, se añadió la parte que a las señoras y a muchos señores les encanta, las compras y ahí nos ves, comprando, pimentón, como no en La Vera, quesos, dulces, aceites, orujos y cosméticos a base de aceite, que no solo es bueno para la salud interior sino para la exterior.

La siguiente etapa no llevo a Losar, por cierto el pueblo en el que viven nuestros anfitriones, y que como particularidad tiene a lo largo de la carretera verdaderas esculturas vegetales, obtenidas mediante poda según el arte topiario, que así se llama el tipo de poda utilizado.

Como había llegado la hora de la merienda, el bueno de Serafín y Encarna, nos dirigieron sutilmente a su casa, donde en un merendero perfecto, nos ofrecieron migas, morcilla de la tierra, empanada, pastas, dulces, . . . . y por supuesto unos vinitos para acompañar, total que estaban dispuestos a que hambre no pasásemos y a que no olvidásemos de nuestras antiguas meriendas de pan con chocolate, o ¿no era chocolate?
La excursión, antes de volver al hotel ha cenar, terminó en Valverde de la Vera, pueblo de los famosos “empalaos” que en Semana Santa hacen su particular vía crucis y que para mi personalmente es el más bonito de la zona, con su arquitectura verata y su calles “regadas” por innumerables acequias.

El día terminó, con la fiesta que después de la cena y como se esta haciendo tradicional, organizó Carlos Barrero, que como no podía ser de otra manera, giro alrededor de música de los 60, que algunas concesiones a otras décadas.

En el desarrollo de la misma los ganadores del concurso de baile, después de demostrar como se baila con una naranja sujeta por la frente o se elude la posesión de la escoba, fueron Serafín y Encarna, ¿será por que conocían el terreno?. La copa se la dejamos a los eternos rivales y se les premio con un precioso marco de estaño repujado, elaborado por Mª Carmen, esposa del Carlos Barrero.

Como dicen las crónicas, a altas horas de la madrugada nos retiramos a descansar, no sin antes cantar “Cordobesita”, dirigidos por Emilio Pombar, antiguo integrante del coro de la Laboral y por Alonso Cuenca ex tuno. . . . Tenemos que seguir ensayando.

Finalmente el domingo tocaban las despedidas, así que después del desayuno y de hacernos las fotos de rigor, los compañeros en función de su destino fueron despidiéndose de forma paulatina, excepto medina docena de nosotros que nos quedamos hasta después de la comida con la que fuimos obsequiados una vez por Serafín y Encarna.

Antes de la comida aprovechamos para visitar la Garganta de Quartos, que posiblemente sea la más bonita de la zona, donde tomamos el correspondiente aperitivo, es decir celebramos el “angelus”.

Comentar como incidencias, que por problemas de salud propios de la edad, a última hora no pudo asistir Antonio Colinas y Sra. que mandaron un e-mail avisándonos pero esperamos contar con ellos para la próxima.

Tampoco nos pudo acompañar Mª Carmen, esposa de Carlos Barrero, que nos envío el regalo que se entrego en el baile y a la que todos echamos de menos, ni Juan Bautista León Izquierdo por viaje ineludible.

Por otra parte nos invadió una enorme alegría cuando llegó Magdalena, viuda de Miguel León Torres, acompaña de sus hijos Álvaro y Noelia y que por expreso deseo de Miguel quiso acompañarnos. Gracias Magdalena e hijos porque a pesar de la paliza que os disteis, nos acompañasteis. Contamos con vosotros para las siguientes.

Por último nuestro amigo Horacio López y su esposa Viri, tuvieron que volver a Coruña en grúa, pues el coche se negó a arrancar.

Quisiera como parte final indicar lo siguiente:
• Los anfitriones perfectos
• El lugar precioso
• El hotel magnifico
• Nosotros, antiguos compañeros irrepetibles
• Y lo que no tiene precio es lo de nuestras esposas, que sin conocerse anteriormente han encajado de tal manera entre ellas y nosotros, que no solo han sido parte fundamental, ya lo fueron el La Alpujarra, del éxito del evento, si no que son imprescindibles para los futuros.

Doy por concluida esta crónica, no sin antes indicaros a todos que por unanimidad la próxima reunión se celebrará en mayo de 2011 en ALMERIA y que la organización les corresponde a Juan Alonso Cuenca y su esposa Maribel.

Un abrazo para todos y hasta. . . . . ¡¡ALMERIA 2011!!

Burgos 26 de mayo de 2010

José Antonio Rodríguez Gil.